Coordinador Gral. de Fundacion 2 Tesoros en 1
La fiesta de San Valentín tiene un origen muy antiguo, que quizás mucha gente no conoce. Todo empezó en la antigua Roma, donde el mes de febrero se consideraba un mes favorable para la preparación de la llegada de la primavera y con ella el renacimiento de la naturaleza.
En este momento los Romanos iniciaban los ritos de purificación: se limpiaba la casa, se esparcían sal y harinas especiales y, a mediados de mes, se celebraba la fiesta de las Lupercales, del dios de la fertilidad Luperculus (que también protegía los rebaños de los lobos). Durante esta fiesta se llevaban a cabo sacrificios de animales cuya sangre se esparcía por las calles de la ciudad como símbolo de fertilidad.
Parece ser que, para festejar esta época tan especial, los sacerdotes del dios Luperculus (los Luperci)proponían a los adoradores de este dios una especie de “lotería de amor”. De hecho, un niño extraía a suerte los nombres de hombres y mujeres, formando de esta manera parejas que vivían en intimidad durante un año entero, llevando a cabo el .
Con la llegada del Cristianismo, los padres de la Iglesia decidieron que ésta práctica era demasiado indecente e instituyeron un santo de los enamorados.La elección recayó en San Valentín (Terni 175 d.C.- 270 d.C.), que dedicò su vida a la comunidad cristiana y fue consagrado obispo en 197 d.C.
Una de las muchas leyendas narra que San Valentín se convirtió en el patrón de los enamorados porque fue el primer obispo que celebró la unión entre un legionario pagano y una mujer cristiana.De todos modos, está comprobado que el santo mostraba una atención especial hacia los enamorados, que solían acudir a él para pedir sus consejos y su bendición.
Las versiones y las leyendas a cerca de San Valentín son muchas y no podemos recogerlas todas en este espacio, pero es un hecho que aún hoy en día, en nuestra cultura, se vive la fiesta de San Valentín como un momento para los enamorados (y no sólo como una ocasión más para consumar).
Es vuestra, entonces, la decisión de celebrar este día con contenidos nuevos y personales. Nosotros os deseamos que estéis enamorados (de la vida misma, no solo de vuestra pareja) todo el año y no solo un día y que vuestra relación de amor os dé satisfacción y bienestar.
¡Feliz San Valentín!
En este momento los Romanos iniciaban los ritos de purificación: se limpiaba la casa, se esparcían sal y harinas especiales y, a mediados de mes, se celebraba la fiesta de las Lupercales, del dios de la fertilidad Luperculus (que también protegía los rebaños de los lobos). Durante esta fiesta se llevaban a cabo sacrificios de animales cuya sangre se esparcía por las calles de la ciudad como símbolo de fertilidad.
Parece ser que, para festejar esta época tan especial, los sacerdotes del dios Luperculus (los Luperci)proponían a los adoradores de este dios una especie de “lotería de amor”. De hecho, un niño extraía a suerte los nombres de hombres y mujeres, formando de esta manera parejas que vivían en intimidad durante un año entero, llevando a cabo el .
Con la llegada del Cristianismo, los padres de la Iglesia decidieron que ésta práctica era demasiado indecente e instituyeron un santo de los enamorados.La elección recayó en San Valentín (Terni 175 d.C.- 270 d.C.), que dedicò su vida a la comunidad cristiana y fue consagrado obispo en 197 d.C.
Una de las muchas leyendas narra que San Valentín se convirtió en el patrón de los enamorados porque fue el primer obispo que celebró la unión entre un legionario pagano y una mujer cristiana.De todos modos, está comprobado que el santo mostraba una atención especial hacia los enamorados, que solían acudir a él para pedir sus consejos y su bendición.
Las versiones y las leyendas a cerca de San Valentín son muchas y no podemos recogerlas todas en este espacio, pero es un hecho que aún hoy en día, en nuestra cultura, se vive la fiesta de San Valentín como un momento para los enamorados (y no sólo como una ocasión más para consumar).
Es vuestra, entonces, la decisión de celebrar este día con contenidos nuevos y personales. Nosotros os deseamos que estéis enamorados (de la vida misma, no solo de vuestra pareja) todo el año y no solo un día y que vuestra relación de amor os dé satisfacción y bienestar.
¡Feliz San Valentín!
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